Apurando las últimas semanas que me quedaban de vacaciones decidimos alquilar una autocaravana y recorrer la zona del Duero portugués (Douro). Al ser octubre el número de turistas baja considerablemente pero siempre juegas con la incertidumbre del tiempo. Tuvimos suerte. Todos los días lució el sol. Habíamos programado unas visitas concretas pero si algo te da la autocaravana es libertad para poder improvisar sobre la marcha. Imprescindible es llevar un GPS y algún dispositivo tipo tablet, o el mismo móvil para ir localizando campings o áreas de autocaravanas. El plan era salir por la mañana y dirección León dormir la primera noche en Puebla de Sanabria (Zamora). Al atardecer llegamos al destino y aparcamos la autocaravana en el Camping Isla de Puebla.
Según nos dijeron era el último día que estaba abierto. Andando al centro tardamos unos 5 minutos. Visitamos el casco antiguo y subiendo por la calle principal llegamos a la plaza central donde está la iglesia y el Castillo de los Condes de Benavente, del siglo XV.
Esta zona antigua está amurallada pudiendo recorrer dicha muralla a través de un camino de ronda. A lo largo de este paseo hay bares con pequeñas terrazas desde donde pudimos disfrutar unas preciosas vistas.
Pasamos la noche. Para ser la primera noche en autocaravama la verdad es que dormimos bastante bien. Por la mañana un buen desayuno y de nuevo carretera con la idea de entrar en Portugal. El destino era una ciudad junto al Duero: Péso Da Regua localizada a 183 km de Puebla de Sanabria según el GPS. Salimos, nos dirigimos a Verin (Orense) y de aquí hacia el sur entramos en Portugal. Ya me había informado de como funcionan los peajes de las autopistas. No hay cabinas sino unos arcos por donde pasas sin detenerte. Al entrar en Portugal por la autopista hay una desviación para los extranjeros. Aquí existen unos cajeros (easy toll) donde introduces la tarjeta de crédito. Una cámara memoriza la matrícula y a partir de entonces cada vez que pasas por un arco la tarifa te la van cargando en la tarjeta. Si tienes un ViaT puedes evitarte estos inconvenientes. Vas pasando por los arcos y te van cargando a tu cuenta.
Pues bien, entramos en Portugal por la A24 y pasando por Chaves y Vila Real llegamos a Péso da Regua. Hay que reconocer que es una autopista fantástica. La llegada a las proximidades del Duero es impresionante por la inmensidad de viñas que, dispuestas en terrazas o bancales, "caen" hacia el río. Creo que nunca había visto tal cantidad de viñas. Pertenecen a la denominación de Ribeira do Douro. Aquí se se producen tanto vinos de mesa como vinos destinados a la elaboración de los llamados Vinos de Oporto.
Péso da Regua es una localidad situada a orillas del río Duero de unos 18000 habitantes, capital de la zona de denominación de "Vinos del Douro".
Fue en 1756 cuando el Marqués de Pombal constituyó la Real Compañía General de la Agricultura de los Viñedos del Alto Duero naciendo así la primera región demarcada de producción vinícola a nivel mundial.
Fuimos recomendados a través de una compañera de trabajo natural de esa ciudad. Desde aquí parten diversos barcos que realizan excursiones a lo largo del Duero llegando incluso hasta Oporto. No es difícil imaginar lo que sería esta localidad hace unos cuantos años cuando desde aquí partían las rabelas transportando el vino hasta Vila Nova de Gaia, localidad situada frente a Oporto, que es donde se localizan las principales bodegas de elaboración del Vino de Oporto. Nos acercamos al muelle y embarcamos para disfrutar de un muy agradable paseo por un Duero plácido y tranquilo de una hora aproximada de duración.
Desde aquí aprecias el paisaje de otra manera y resulta impresionante como los bancales de viñas llegan hasta la misma orilla.
En una de las colinas pudimos ver esta silueta tan portuguesa, que se podría comparar a nuestro toro ibérico y que se corresponde con una marca de vino de Oporto: Sandeman.
Una vez terminado el paseo cogimos la autocaravana y fuimos a visitar una bodega de la familia de esta compañera: Quinta Seara D'Ordens. Fuimos recibidos por Joao quien nos atendió estupendamente. En una entrada anterior de este blog ya he mencionado a esta bodega o Quinta (asi les llaman en Portugal a las bodegas) y a los vinos que elaboran. También me gustaría recalcar la producción de un excelente aceite de oliva virgen extra. La siguiente etapa era llegar hasta Guimarães (106 Km) pero se hizo un poco tarde y optamos por ir a Lamego, localidad situada a 14 Km.
Esta localidad no estaba dentro del programa paro dada la hora que era preferimos pasar noche ahí y al día siguiente poner rumbo a Oporto. Lamego está situada en el margen sur del río Duero y actualmente cuenta con cerca de 11000 habitantes. Sus orígenes son antiquísimos, de la época de los romanos. Gastronómicamente destaca por el jamón y por la producción de vinos de Oporto. Pues bien, llegamos a media tarde y nos instalamos en el Camping Lamego. Personalmente el que más me gustó de todo el periplo portugúes. Un camping pequeño con unos diez aparcamientos para autocaravanas. Localizado en el extrarradio de la ciudad y situado a cierta altura sobre la ciudad. Buenas vistas de la ciudad.
Se notaba que anteriormente había sido una propiedad privada, reconvertida a camping, porque los edificios y las instalaciones estaban muy cuidadas y muy bien atendidas.
Entre los monumentos a visitar destaca el Santuario de Nossa Senhora Dos Remédios, de estilo rococó, construído en el siglo XVIII. Es un importante centro de peregrinación de Portugal. Se puede acceder en coche o andando desde el centro de la ciudad. Nosotros elegimos esta segunda opción. Son 686 escaleras con una disposición como la que vemos en la fotografía superior. En cada uno de los descansos aparecen azulejadas las paredes con los colores clásicos de la cerámica portuguesa y que representan diferentes motivos religiosos.
Esta escalera es un proyecto del arquitecto italiano nacido en la Toscana Nicolau Nasoni (1691-1773). La mayor parte de su vida la pasó en Portugal y ha dejado numerosas obras. Esta en concreto no la pudo ver realizada ya que se construyó en el siglo XIX. La ascensión hasta allí arriba lleva un buen rato y se suda de lo lindo pero compensa por la construcción en sí y por las vistas que poco a poco vas teniendo de la ciudad.
Otro de los edificios interesantes es la Catedral, llamada Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, de estilo gótico y que conserva la torre campanario cuadrada original del siglo XII.
Nos pareció una ciudad tranquila, muy cuidada y como siempre, con una gente de lo más amable. Cenamos muy frugalmente en una vinoteca y fuimos al camping a dormir. Previamente encargamos el desayuno para el día siguiente. Fue una noche muy tranquila. Al día siguiente desayunamos y dirección a Oporto, concretamente al Camping Orbitur Madalena (www.orbitur.pt/pt/destinos/regiao-norte/orbitur-madalena). Un camping localizado en Vila Nova de Gaia, frente a Oporto, al otro lado del Duero. Un autobús de línea paraba delante del camping. Fue el medio que utilizamos para llegar al centro de Oporto. Tardaba entre 20 y 30 minutos.
Un camping que nada tenía que ver con el de Lamego. De mucha extensión y con zona de autocaravanas dentro de un bosque de eucaliptos. Frente al camping estaba la playa de la Madalena, zona turística donde muchos portugueses tienen su segunda residencia. No se si la proximidad del mar junto a la desembocadura del Duero tenía algo que ver pero por la tarde y hasta bien entrada la mañana la zona se cubría de una espesísima niebla. Aquí pasamos tres noches. Todos los días con muy buen tiempo y muy buena temperatura.
Esta fotografía de Oporto esta sacada desde un telecabina que ascendía de Vila Nova de Gaia a la zona alta. Desde aquí y andando por la parte superior del Puente de Don Luis I, entrabas en la ciudad. A la derecha del Duero vemos la ciudad de Oporto y a la izquierda Vila Nova de Gaia. Aquí es donde se localizan las bodegas más importantes del vino de Oporto. Al fondo se puede apreciar la niebla matinal en la desembocadura del río. En la orilla de la izquierda podemos ver los rabelos, barcos típicos que se encargaban del transporte de vino desde la parte alta del Duero hasta Vila Nova de Gaia para "fortificarlo" y convertirlo en Vino de Oporto.
En la siguiente entrega nos adentraremos en esta preciosa ciudad y recorreremos otras localidades portuguesas.
Un saludo,
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